El Laboratorio de Cultivo Celular (LCC) del CIBICI está destinado a facilitar los recursos necesarios para el manejo de líneas celulares y cultivos primarios. Actualmente, el LCC cuenta con dos áreas de trabajo, cada una de ellas provistas con equipamiento propio, destinadas una al trabajo con líneas celulares y otra a la manipulación de muestras biológicas provenientes de pacientes o cultivos primarios derivados de animales de experimentación infectados con agentes patógenos. Estas instalaciones se complementan con el acceso a otras áreas de trabajo del CIBICI como el Bioterio y una diversidad de equipos de uso general (centrífugas de placas, microscopios de fluorescencia, citómetros, etc).
El personal del LCC lleva a cabo tareas de acondicionamiento del material de trabajo, incluyendo la preparación de medios de cultivo líquido y la esterilización de soluciones e insumos varios. Asimismo, desde el LCC se brinda capacitación y asesoramiento a los usuarios (estudiantes e investigadores), y se promueven las buenas prácticas de laboratorio. Para ello, se controla el cumplimiento de las normas para el buen uso de las instalaciones y del equipamiento, ajustándose a las normas de bioseguridad según los estándares internacionales.
Actualmente, los usuarios del LCC cuentan con el servicio de control periódico de la contaminación por Mycoplasma y el tratamiento para su eliminación con antibióticos específicos en las células contaminadas.
Infraestructura
El laboratorio cuenta con 8 cabinas de flujo laminar de seguridad biológica tipo II asociadas a bombas de vacío, 6 incubadoras con temperatura y atmósfera controlada, 3 heladeras para el mantenimiento de medios de cultivo y reactivos empleados por los usuarios, 3 termos de N2 líquido para la criopreservación de células, 4 centrífugas de mesada, 2 microscopios ópticos de campo claro y 3 invertidos con contraste de fases.